MAGDALENAS DE NATA
A veces los desayunos se vuelven monótonos y aburridos, por eso cada cierto tiempo trato de buscar alguna receta que aporte un aliciente a la dureza del madrugón matutino.
En esta ocasión he preparado estas magdalenas de nata. Es una receta sencilla, del blog Magia en mi Cocina que tanto me gusta. El resultado son unas magdalenas ricas, jugosas y con un aspecto inmejorable.
MAGDALENAS DE NATA
350 gr de harina
250 gr de azúcar250 ml de aceite de girasol
100 ml de nata (1/2 brick de los pequeños)
1 sobre de levadura Royal
4 huevos
Una pizca de esencia de vainilla (se puede sustituir por ralladura de limón)
Se baten los huevos con el azúcar, se puede batir con la batidora eléctrica de varillas o si no se dispone de ella con unas varillas manuales. Batimos hasta que quede una crema espumosa, de color blanquecino en la que al levantar la varilla se deje una estela.
Una vez bien batidos los huevos con el azúcar, añadimos la esencia de vainilla (ralladura de limón), se bate de nuevo y echamos el aceite poco a poco, en forma de hilillo, sin dejar de batir.
Una vez mezclado, se echa la nata poco a poco, de igual forma que el aceite. Una vez bien mezclado añadimos la harina y la levadura, previamente tamizadas. Para no bajar la crema que hemos conseguido, añadimos la harina poco a poco, la vamos incorporando a la mezcla con ayuda de una lengua o espátula, con movimientos envolventes.
A continuación, llenamos los moldes de magdalenas hasta unas 3/4 partes de su volumen. Una vez llenos los espolvoreamos con azúcar y los horneamos.
Una vez bien batidos los huevos con el azúcar, añadimos la esencia de vainilla (ralladura de limón), se bate de nuevo y echamos el aceite poco a poco, en forma de hilillo, sin dejar de batir.
Una vez mezclado, se echa la nata poco a poco, de igual forma que el aceite. Una vez bien mezclado añadimos la harina y la levadura, previamente tamizadas. Para no bajar la crema que hemos conseguido, añadimos la harina poco a poco, la vamos incorporando a la mezcla con ayuda de una lengua o espátula, con movimientos envolventes.
A continuación, llenamos los moldes de magdalenas hasta unas 3/4 partes de su volumen. Una vez llenos los espolvoreamos con azúcar y los horneamos.
El horno tiene que estar precalentado, las magdalenas se hornean (siempre depende de cada tipo de horno) a 175º con calor arriba y abajo durante 15 minutos y luego durante 5 minutos más a la misma temperatura pero con calor sólo por abajo. Antes de retirarlas hemos de comprobar con una aguja, o en su defecto con la punta de un cuchillo, que están cocinadas en su interior, para ello introducimos la aguja en el interior de una magdalena y comprobamos que sale limpia y seca.
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