La receta que traigo hoy la hacía mi madre muy a menudo cuando era niña. Es de esas recetas que siempre puedes hacer por que es rara la casa en la que no hay huevos y patatas.
miércoles, 24 de noviembre de 2010
La receta que traigo hoy la hacía mi madre muy a menudo cuando era niña. Es de esas recetas que siempre puedes hacer por que es rara la casa en la que no hay huevos y patatas.
martes, 23 de noviembre de 2010
Seguimos al rescate de artilugios y piezas sueltas, de vajilla y menaje, entre las cosas de mi abuela. Buscando, buscando, hemos dado con la cazuela de barro que véis en la foto, que viene siendo prima hermana de la que os enseñaba el otro día. Como no podía ser de otra manera, la cazuelita pedía a gritos algún plato de marisco que le diera vida y, dicho y hecho, la hemos puesto a funcionar con el arroz meloso de nécoras que hoy vengo a compartir con vosotros.
400 gr de arroz tipo bomba
1500 ml de caldo de pescado2 dientes de ajo
1 pimiento verde1 cucharadita de pimentón
1 sobre de colorante alimentario El PayasoSal
1 chorro de tomate triturado4 nécoras
Aceite de olivaPonemos a calentar en el fuego una tartera de barro con un buen chorro de aceite de oliva. Cuando el aceite esté caliente añadimos la cebolla pelada y cortada en brunoise. Dejamos rehogar y cuando la cebolla esté transparente añadimos los dientes de ajo pelados y picados en brunoise. Rehogamos unos minutos más e incorporamos el pimiento verde, lavado y cortado en daditos.
Cuando comience a hervir añadimos sal y dejamos cocer por espacio de 10 minutos. En este momento, incorporamos las nécoras partidas por la mitad y dejamos cocer otros 10 minutos más.
jueves, 18 de noviembre de 2010
Hoy para cenar he preparado unos huevos al plato de aquellos que hacía mi madre. A pesar de que en casa los guisantes no son muy bien vistos, cocinados de esta manera gustan a todos. La receta no tiene complicación pero es importante que los guisantes sean de buena calidad ya que son el ingrediente principal del plato.
HUEVOS AL PLATO
Para 2 personas
350 gr de guisantes congelados
1/2 cebolla
1/2 vasito de tomate frito
5 lonchas gruesas de bacon ahumado
1 cucharadita de pimentón
Sal
4 huevos
Un chorro de aceite de oliva
En una cazuela, con agua hirviendo con sal, cocemos los guisantes por espacio de 8 minutos. Una vez cocidos, escurrimos y refrescamos con agua fría. Con este contraste de temperaturas conseguiremos que los guisantes se queden con un bonito color verde y no oscurezcan. Volvemos a escurrirlos y reservamos.
En una sartén al fuego echamos un chorro de aceite de oliva. Cuando el aceite esté caliente añadimos la cebolla pelada y cortada en brunoise. Rehogamos hasta que esté transparente. En este momento, añadimos 3 de las lonchas de bacon cortadas en daditos. Rehogamos de nuevo un par de minutos e incorporamos la cucharadita de pimentón. A continuación, incorporamos la salsa de tomate, revolvemos y añadimos los guisantes cocidos que habíamos reservado. Rehogamos de nuevo todo junto unos minutos.
Cogemos dos cazuelitas de barro y disponemos en el fondo de cada una de ellas las lonchas de bacon que nos han sobrado. Repartimos los guisantes rehogados entre las dos cazuelas.
Ahora cascamos los huevos e incorporamos, con cuidado de que no se nos rompan, dos en cada recipiente. Espolvoreamos unas arenitas de sal por encima de los huevos.
Introducimos las cazuelitas de barro en el horno que habremos precalentado a 200ºC con calor arriba y abajo. Dejamos cuajar los huevos por espacio de diez minutos. Antes de retirar los recipientes del horno, comprobamos que se hayan cuajado los huevos completamente.
Es conveniente que tengáis cuidado de no quemaros a la hora de poner las cazuelas en la mesa ya que el barro aguanta mucho el calor.
martes, 16 de noviembre de 2010
El otro día nos regalaron unas jibias preciosas y aprovechando que teníamos tiempo las preparamos para comer con la receta que hoy os vengo a proponer. La receta no es nada complicada y el resultado buenísimo. Da un poco de trabajillo limpiarlas pero luego el resto es muy sencillo.
JIBIA EN TINTA
Para 6 personas
2 kg de jibia sin limpiar (tres unidades)
2 cebollas medianas
4 dientes de ajo
1 pimiento rojo
1/2 vasito de tomate triturado
1 buen chorro de aceite de oliva
1/2 vasito de vino blanco
Sal
Limpiamos y lavamos las jibias, retirándoles la concha. Las cortamos en trozos medianos y las reservamos.
En un bol aparte abrimos con un cuchillo las tintas de la jibia y las mezclamos con el vino blanco. Revolvemos para diluir y retiramos las pieles de las bolsas de la tinta. Reservamos.
Ponemos a calentar una cazuela de barro y echamos un buen chorro de aceite de oliva. Cuando el aceite esté caliente añadimos las cebollas peladas y picadas en juliana. Cuando la cebolla comience a tomar color transparente añadimos los dientes de ajo picados en brunoise y rehogamos un par de minutos. En ese momento, agregamos el pimiento rojo, al que le hemos retirado las pepitas, picado en daditos, revolvemos y dejamos cocinar. Cuando las verduras estén bien rehogadas agregamos el tomate triturado. Revolvemos y añadimos ahora la jibia limpia y troceada. A continuación y a través de un colador añadimos el vino que hemos mezclado con la tinta, lo hacemos así para evitar que se nos pueda colar cualquier granito o particular sólida que venga con la tinta. Salamos, revolvemos y dejamos cocinar la jibia por espacio de 15 a 20 minutos. Transcurrido este tiempo la probamos antes de retirarla del fuego para comprobar que está tierna. Si es necesario corregimos de sal.
Si la salsa os queda demasiado líquida la podéis espesar diluyendo en medio vasito de agua fría una cucharada sopera de Maicena e incorporando esta mezcla a la salsa.
Como guarnición yo he preparado un arroz en blanco pero lo podéis acompañar también con patatas cocidas.
lunes, 8 de noviembre de 2010
El otro día rebuscando entre las cosas de mi abuela me encontré con esta sopera. Nada más verla me entraron unas ganas terribles de lavarla y ponerla en uso. Seguro que algunos pensáis que resulta algo kitsch pero a mí me tiene enamorada y he pensado que un potaje de garbanzos con espinacas combinaría estupendamente con ella. No me diréis que no te quedas con todo el mundo cuando la llevas a la mesa.
POTAJE DE GARBANZOS CON ESPINACAS
Para 6 personas
500 gr de garbanzos
400 gr de espinacas frescas
1 hoja de laurel
1 cebolla mediana
1 cucharadita de pimentón
Aceite de oliva
1 cucharada sopera de harina
3 huevos
Sal
Nuez moscada
La noche anterior ponemos los garbanzos a remojo.
Cocemos los tres huevos por espacio de diez minutos y los reservamos.
En una cazuela al fuego, ponemos a hervir abundante agua con sal y la hoja de laurel. Cuando levante el hervor añadimos las espinacas limpias. Las cocemos por espacio de 8 minutos. En este momento las sacamos, con ayuda de una espumadera, y las reservamos. Ponemos a calentar de nuevo el agua de haber cocido las espinacas, cuando comience a hervir añadimos los garbanzos escurridos (es importante cocerlos a partir de agua hirviendo para evitar que se endurezcan). Yo los he cocido en olla a presión durante 10 minutos. Una vez cocidos y tiernos los reservamos en el agua en la propia cazuela.
Aparte, en una sartén con aceite de oliva sofreímos la cebolla pelada y cortada en brunoise, cuando comience a estar transparente añadimos la cucharada de harina y revolvemos. Añadimos ahora la cucharadita de pimenton y la nuez moscada molida. Revolvemos y añadimos las espinacas que habíamos reservado. Cocinamos el sofrito por espacio de cinco minutos. Ahora agregamos el sofrito a la cazuela de los garbanzos. Por último añadimos los huevos duros picados, y dejamos cocer todo junto por espacio de diez minutos. Probamos y corregimos la sal si es necesario. Si os ha quedado el potaje muy suelto podéis espesarlo machacando algunos de los garbanzos.
miércoles, 3 de noviembre de 2010
Será por el cambio de hora o porque hemos tenido un puente pasado por agua, pero la verdad es que en estos días no me he encontrado con muchas ganas de complicarme la vida en la cocina.
850 gr de lomo de cerdo en una sola pieza
Introducimos en el horno previamente precalentado a 180ºC, con calor arriba y abajo, y cocinamos por espacio de 40-45 minutos.